***LA NOCHE ***
A
veces, desde que te marchaste, cuando me despierto en medio de la noche en mi
habitación acunado por la oscuridad y mecido por el silencio, en
ese estado mágico de duermevela en el que siempre se consigue lo que se anhela sin apenas esfuerzo, logro detener el tiempo. Y
entonces puedo hacer realidad cualquier pensamiento. Cualquier situación que desee
se materializa y sucede en realidad. Y soy capaz de manipular a cronos como si
de una moviola se tratase, yendo hacia adelante y hacia atrás a voluntad, viviendo
y reviviendo una y otra vez decenas de veces cada instante deseado. Y puedo ver, oír, oler, gustar y tocar. Y sentir miedo, compasión, rabia, deseo,
ira... Todas las emociones son reales. Y las cosas acontecen y transcurren de
la misma forma y con la misma esencia con la que suceden en la otra realidad;
en la realidad consciente de la luz y el espacio; en esa siniestra realidad en
la que casi todos estamos obligados a ocultar lo que sentimos, a acallar
nuestros deseos y a fingir casi siempre diciendo y haciendo lo que los demás
esperan de nosotros, aunque lo que les mostremos no sea verdad, aunque no nos
beneficie a ninguno.